Sí, quienes siguen el canal de YouTube saben que hice un directo, pero qué rayos, tenía mucho tiempo sin postear nada, y si hay un espacio que me permite explotar mejor mis opiniones y argumentos, ese es el blog. La semana pasada el mundo se estremeció con el anuncio de una nueva serie producida por Warner Bros. y que presuntamente será transmitida por Cartoon Network, llamada Thundercats Roar. La inmensa mayoría de los usuarios de YouTube bombardeamos el trailer oficial con dislikes y comentarios de desagrado ante esta cosa. Claro, es como todo, hay defensores de esto, cuyos argumentos (me perdonan) dan risa y pena. He visto varios videobloggers hablando del tema, con opiniones variopintas, y con base en lo que me he encontrado, escribiré lo siguiente. Lamento si hiero susceptibilidades, pero en esta ocasión no pretendo agradar a nadie. Dicho esto, comenzamos.
Para empezar, Thundercats es una serie de culto, es decir, representa una referencia obligada en el mundo de la animación. Desde su aparición en 1985 impactó a los televidentes del mundo entero por su estética visual -algo sublime sin duda alguna-, su música -el opening es de los más emocionantes que existen-, una historia estupenda, personajes memorables y con personalidades muy bien definidas. Es más, con todo y que era una serie de acción, tenía un elemento de comedia -Snarf- bien dosificado, que no desencajaba con la trama central, y eso es muy difícil de lograr. Los buenos eran buenos y los villanos eran villanos -cosa que también tenía He-Man, aunque en esta otra serie había algo más de comedia-. Es más, la gente amaba a Mumm-Ra precisamente porque no se andaba con rodeos, era ambicioso, despiadado, cruel. Un señor villano. Por otra parte, los héroes eran valerosos, nobles, leales, decididos. ¿Dudan de la gallardía de Leon-O, o del carácter de Panthro, o de la agilidad de Tygro o la determinación de Cheetara? (No se molesten si no nombro a Felino y Felina, siendo los más chicos tenían lo suyo también). Todo era muy elemental, sin embargo existía profundidad en la trama.
Este es un fragmento del capítulo 1.
¿Vieron la intro? Si hoy en día aún parece algo impresionante, imagínense el hype en 1985. Hubo un trabajo serio, en el que la calidad debía ser total. Producir un solo capítulo se llevaría muchos meses, pero la recompensa sería el éxito absoluto. Esta magnífica producción estuvo al aire por 4 temporadas, y viéndolo bien, fue lo mejor. Jamás hubo una saturación excesiva de Thundercats, y en los fans quedó un recuerdo bien plasmado.
Ahora bien, en el año 2011 se hizo una nueva versión de esta franquicia, esta vez al más puro estilo anime, con ilustradores japoneses, una historia diferente, una estética distinta... ¿Pero saben? Se mantuvo la esencia de 1985, se notó esa misma magia, y el trabajo quedó impecable. Okey, no tuvo un opening, pero el resto fue una obra maestra. Lamentablemente, la respuesta en cuanto a marketing no fue la misma de hacía 26 años atrás, y dados los altos costos que implicaba esta serie, sólo se quedó por una temporada. Pero repito, la calidad era altísima y eso agradó mucho a los seguidores.
Pero de pronto llega 2018 y nos presentan lo que ahora llaman un "reboot" con el estilo de animación que ahora le quieren meter a los niños hasta en la sopa, creando la sensación de que eso es lo más cool o de moda y que es lo mejor en dibujos animados, o sea, un montón de muñecos deformes hecho por gente con serios problemas. ¿Dónde quedó la estética? ¿Dónde quedó la magia? El tipo que encabeza el proyecto -que de paso, dice hipócritamente que era fan de la serie original- pretende repetir una fórmula "exitosa" pero que todos sabemos que es totalmente destructiva. Me perdonan, pero meterle a una serie tan épica el gen de Tío Grandpa no es otra cosa sino una aberración.
Más de uno saldrá a decir que siempre ha habido aberraciones, como Ren y Stimpy o Ed, Edd y Eddy, y sí, tienen razón, pero hay una gran diferencia. Ren y Stimpy fue un fenómeno, fue irreverencia con crítica social, su estilo de animación era único y su humor hasta el sol de hoy sigue siendo inigualable. South Park es otra serie icónica. Ed, Edd y Eddy maneja el absurdo de manera genial, con mucha autenticidad. Coraje, el perro cobarde es hermosa. Daba miedo a los niños, pero los mantenía frente a la pantalla. En fin, puedo nombrar muchas, me gusten o no me gusten -Bob Esponja no me gusta-, pero que son auténticas, con su propio sello. Hoy en día todo se parece, y lo peor, se parece en lo feo, deforme, desganado, estéticamente desastroso, mal animado, con historias vacías pero infladas con memes -y sobre todo, muchísima carga política progre-. A mí me parece genial que metan esos contenidos en series nuevas y originales, pero ¿por qué ultrajar lo que ya existió y fue hermoso?
Y seguro va a venir uno a decirme que el tiempo pasa, que el pasado ya pasó y que lo que domina en el presente es esa nueva animación -que según me explicaron la llaman Calarts-, y que como eso es lo que le gusta a los niños, entonces hay que darle eso a los niños. No me jodan con eso. Yo vivo en un país en el que a los niños les gusta perrear en fiestas y cantan temas de trap "tú me lo mamas y yo te lo meto" y no por eso es buen contenido para ellos. Si tú ves a un niño comiendo papel usado del baño y le gusta, ¿dejarías que se lo siga comiendo por el simple hecho de que le gusta? No, ¿verdad? Ni ese estilo de animación es bonito, ni esas tramas están bien hechas, ni el humor da risa. Es como si creyeran que los niños deben ser tratados como estúpidos... o que deben aprender algo que desconocemos, no lo sé, una lavadita de cerebro, qué sé yo. Tal vez por este post me mencionen un montón de temas más o me califiquen de tal o cual fobia. Eso lo podremos hablar luego, sin problemas.
Al final de todo esto sigo pensando que hay un grupo pequeño pero escandaloso de gente que se propuso destruir todo lo que para la mayoría sea icónico, emblemático, hermoso, estético y sagrado. Ese grupito de amargados que aprovechan cualquier espacito para querer llenar al resto -usando a débiles de conciencia- de sus gruñidos. Menos mal que como nadie se les acerca, no se van a reproducir, así que en corto tiempo no veremos más gente con esa actitud y retomaremos las cosas bonitas y dulces de nuestra ya maltratada humanidad... Cosas bonitas como por ejemplo Thundercats y no esa cosa que ahora llamo Tumblrcats.
Y no, no soy progre, ni zurdo, mucho menos rojo.
Ahora bien, en el año 2011 se hizo una nueva versión de esta franquicia, esta vez al más puro estilo anime, con ilustradores japoneses, una historia diferente, una estética distinta... ¿Pero saben? Se mantuvo la esencia de 1985, se notó esa misma magia, y el trabajo quedó impecable. Okey, no tuvo un opening, pero el resto fue una obra maestra. Lamentablemente, la respuesta en cuanto a marketing no fue la misma de hacía 26 años atrás, y dados los altos costos que implicaba esta serie, sólo se quedó por una temporada. Pero repito, la calidad era altísima y eso agradó mucho a los seguidores.
Pero de pronto llega 2018 y nos presentan lo que ahora llaman un "reboot" con el estilo de animación que ahora le quieren meter a los niños hasta en la sopa, creando la sensación de que eso es lo más cool o de moda y que es lo mejor en dibujos animados, o sea, un montón de muñecos deformes hecho por gente con serios problemas. ¿Dónde quedó la estética? ¿Dónde quedó la magia? El tipo que encabeza el proyecto -que de paso, dice hipócritamente que era fan de la serie original- pretende repetir una fórmula "exitosa" pero que todos sabemos que es totalmente destructiva. Me perdonan, pero meterle a una serie tan épica el gen de Tío Grandpa no es otra cosa sino una aberración.
Más de uno saldrá a decir que siempre ha habido aberraciones, como Ren y Stimpy o Ed, Edd y Eddy, y sí, tienen razón, pero hay una gran diferencia. Ren y Stimpy fue un fenómeno, fue irreverencia con crítica social, su estilo de animación era único y su humor hasta el sol de hoy sigue siendo inigualable. South Park es otra serie icónica. Ed, Edd y Eddy maneja el absurdo de manera genial, con mucha autenticidad. Coraje, el perro cobarde es hermosa. Daba miedo a los niños, pero los mantenía frente a la pantalla. En fin, puedo nombrar muchas, me gusten o no me gusten -Bob Esponja no me gusta-, pero que son auténticas, con su propio sello. Hoy en día todo se parece, y lo peor, se parece en lo feo, deforme, desganado, estéticamente desastroso, mal animado, con historias vacías pero infladas con memes -y sobre todo, muchísima carga política progre-. A mí me parece genial que metan esos contenidos en series nuevas y originales, pero ¿por qué ultrajar lo que ya existió y fue hermoso?
Y seguro va a venir uno a decirme que el tiempo pasa, que el pasado ya pasó y que lo que domina en el presente es esa nueva animación -que según me explicaron la llaman Calarts-, y que como eso es lo que le gusta a los niños, entonces hay que darle eso a los niños. No me jodan con eso. Yo vivo en un país en el que a los niños les gusta perrear en fiestas y cantan temas de trap "tú me lo mamas y yo te lo meto" y no por eso es buen contenido para ellos. Si tú ves a un niño comiendo papel usado del baño y le gusta, ¿dejarías que se lo siga comiendo por el simple hecho de que le gusta? No, ¿verdad? Ni ese estilo de animación es bonito, ni esas tramas están bien hechas, ni el humor da risa. Es como si creyeran que los niños deben ser tratados como estúpidos... o que deben aprender algo que desconocemos, no lo sé, una lavadita de cerebro, qué sé yo. Tal vez por este post me mencionen un montón de temas más o me califiquen de tal o cual fobia. Eso lo podremos hablar luego, sin problemas.
Al final de todo esto sigo pensando que hay un grupo pequeño pero escandaloso de gente que se propuso destruir todo lo que para la mayoría sea icónico, emblemático, hermoso, estético y sagrado. Ese grupito de amargados que aprovechan cualquier espacito para querer llenar al resto -usando a débiles de conciencia- de sus gruñidos. Menos mal que como nadie se les acerca, no se van a reproducir, así que en corto tiempo no veremos más gente con esa actitud y retomaremos las cosas bonitas y dulces de nuestra ya maltratada humanidad... Cosas bonitas como por ejemplo Thundercats y no esa cosa que ahora llamo Tumblrcats.
Y no, no soy progre, ni zurdo, mucho menos rojo.
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